lunes, 9 de abril de 2007

El insoportable paternalismo (rsd)

La semana antepasada -por que la pasada me desconecté del mundo-, fueron innumerables los titulares, noticias de ultima hora y análisis que el departamento del Choco protagonizó. Faltaba más, 43 niños muertos por mala nutrición, eso conmueve todos los corazones occidentales, ¿no? Por eso el 1,2,3 habló del tema, los brillantes columnistas de Semana dieron muestra de sus conocimientos sobre los departamentos colombianos y Julito en la W pudo sacar a relucir sus profundos e interesantes conclusiones sobre el mundo. Las preguntas estaban bien justificadas, ¿donde esta el gobierno?, ¿y el ICBF?, ¿y la plata?,¿es el Choco viable? Todas son muestras del insoportable paternalismo occidental y la ofensiva forma de ver al otro como un ente que debe ser dominado, subyugado y pensando como nosotros.

El Choco es lo ominoso. Como diverge de todo posible centro y valor esperado se vuelve un algo incomodo que debe ser "salvado", "cambiado", "dividido","destruido". No hay espacio para más, el Super Gobierno Central (SGC) debe, en cabeza de su Mesías, salvar a la "pobre" población chocoana. Es interesante el insoportable paternalismo del siglo XXI, cuando Colombia, desde el siglo XVIII, explotó a diestra y siniestra los recursos humanos y naturales del Choco. La extracción minera y la producción de caucho son paradigmas de la explotación humana y de recursos naturales, veni, vidi, vici parece la macabra consigna de los colonos que pasaron por el departamento.

Hoy se propone que el Choco se desintegre, que pase a manos del Valle y Antioquia, de nuevo a los colonos, no basta con la historia. Ahora la nueva consigna es que Choco debe pensarse igual que se piensa a Cali o a Medellín. Con una especie de panacea llegarán los nuevos consejeros del gobierno, la formula mágica traída de otras ciudades para poner al Choco en marcha con el siglo XXI. Es la ingenua posición de quien cree tener respuestas a todo, es como resolver problemas de física con recetas de cocina, así los modelos de salvación para el Choco. Cuando no se entiende la diferencia de uno y otro, no es posible pensar en "planes de choque".

Hasta que punto es lo anterior aceptable, ¿ hasta cuando la prepotencia y orgullo del SGC podrá entender que tal vez el hombre y mujer del pacífico difieren del hombre y mujer del caribe, el Amazonas o el interior? El punto es la aceptación y entendimiento del otro, la comprensión de la diversidad, ¿es imposible pensar que tal vez el indígena chocoano no le teme a la muerte como lo hace el "hombre civilizado"?.

Las preguntas de la prensa debían incluir, ¿por qué hasta ahora el Choco importa?, ¿no murieron antes mucho más niños?, ¿como llegaron estos niños a los hospitales?, ¿los niños estaban vivos en un intento afanado de sus padres por salvarlos o llegaron sus cuerpos sin vida solo para ser declarados difuntos?, ¿quién encontró la cifra de estos niños?, ¿por qué se publicó? El insoportable paternalismo es ese deseo de inclusión y caudillismo. Me la juego por una Colombia indiferente, si la consigna de no ser indiferentes trae consigo el intento de vernos y convertirnos a todos en iguales. Bajo el prepotente supuesto que nuestro status quo es mejor y es deseado por el otro.